Después de contemplar todas las posibles teorías, de plantearme vidas paralelas e incluso otras dimensiones he llegado al punto de no retorno: La Nada. Así es, tal cual como suena. Así de simple y complejo al mismo tiempo. Me retiro de muchos lugares, del trato con otras personas para al fin llegar a mi misma. Agotada de luchar en contra de todo y de todos ya solo me queda fluir con la vida, aceptar que todo cuanto he vivido mi alma lo escogió previamente antes de encarnar en este planeta llamado Tierra. Somos una mota de polvo de este universo mágico y misterioso. Creo que he rozado el infinito y mas allá dentro de mis limites y me planto aquí. Sé que poca gente va a entender mi decisión pero es mi vida y soy yo la que respondo por ella. Estoy tan acostumbrada a aniquilarme a mi misma para renacer de nuevo que da miedo la velocidad con la que tomo decisiones tan drásticas, pero sé que es por un propósito mayor y eso me alienta a seguir.
Podría explicar sobre mis experimentos con la naturaleza, por mis descubrimientos a la hora de comprender como funcionan energeticamente los árboles. La conexión que tiene entre ellos de forma subterránea y como en una hilera en la que están plantados en la tierra uno es el líder y cuida y alimenta al resto. O podría explicar las infinitas posibilidades que tenemos todos en cada decisión que tomamos a cada segundo de crear nuestra propia realidad y eso nos lleva a un futuro de éxitos y abundancia.
Mi mente ha llegado a una comprensión que ya es muy difícil de ignorar, ya no hay vuelta atrás. Cada cual su camino y con ello asumiendo las consecuencias por mucho que nos pesen. A veces, (disculpadme mi soberbia), siento que trato con primates, ¿Como puede uno acercarse a una cueva en la edad de piedra e intentar dialogar con hombres cavernícolas? Llevo intentándolo toda mi vida y he fracasado, o tal vez mi «misión» no esta en hablar nada de lo que sé sino solo hacer acto de presencia y luego retirarme. Ya forma parte de mi, entrar en un circulo, interactuar un tiempo y luego proseguir mi camino. Sé que, al igual que a mi me ha ocurrido en un pasado y me seguirá ocurriendo la clave esta en desaparecer, el ser humano es tan sumamente ignorante que solo valora lo que no «posee». Como si alguna vez pudiera ser propietario de algo que no sean sus propios recuerdos, y a veces ni eso. Al fin y al cabo todo lo que vivimos son ilusiones o no, ¿quien sabe?
Me agoté de nutrir a egos sordos que me rodean, de alimentar con mi energía día a día personas cobardes como yo, que buscan desesperadamente la atención. Me retiro, tal vez porque empiezo a comprender la naturaleza de la que estamos hecha y ya no me sirve. Tantos planes en mente se quedan en nada, en experiencias vividas para llegar al punto donde me encuentro justo ahora y en el fondo intuyo que ese era su fin…
LEELOO 